Más allá de los años: cómo mantener una vida sexual plena después de los 60
La sexualidad en la tercera edad: mitos y realidades
Hablar de sexualidad en la tercera edad sigue siendo un tema rodeado de tabúes. Muchas personas creen que el deseo o la actividad sexual “se apagan” con los años, pero nada está más lejos de la realidad.
La sexualidad no tiene fecha de caducidad, aunque sí puede transformarse con el paso del tiempo.
Mito: “A cierta edad, el deseo sexual desaparece”
Falso.
El deseo puede disminuir, pero no desaparece. Factores como el cansancio, los medicamentos, las enfermedades crónicas o el estrés influyen más que la edad en sí. Con un buen estado físico y emocional, muchos hombres mantienen una vida sexual activa y satisfactoria hasta edades avanzadas.
Mito: “La disfunción eréctil es inevitable con la edad”
Parcialmente falso.
Es cierto que la erección puede tardar más en lograrse o no ser tan firme como antes, pero eso no significa que sea imposible tener relaciones sexuales.
La disfunción eréctil no es una consecuencia natural del envejecimiento, sino un síntoma de alteraciones en la circulación, en el sistema nervioso o en los niveles hormonales, muchas veces tratables con la ayuda médica adecuada.
Mito: “A esta edad, ya no importa la vida sexual”
Completamente falso.
La sexualidad va más allá del acto sexual. En esta etapa, la intimidad, el cariño, las caricias y la conexión emocional toman un papel aún más importante. Mantener una vida sexual activa puede mejorar el estado de ánimo, fortalecer la autoestima y contribuir a una mejor calidad de vida.
Realidad: el cuerpo cambia, pero el placer sigue siendo posible
Con el paso del tiempo, el cuerpo masculino experimenta cambios:
Menor producción de testosterona.
Erecciones menos frecuentes o menos firmes.
Mayor tiempo de recuperación entre encuentros.
Sin embargo, estos cambios no impiden disfrutar del sexo. Con buena comunicación en pareja, adaptación y atención médica cuando es necesario, la satisfacción sexual puede incluso mejorar.
¿Cómo mantener una vida sexual activa y saludable en la tercera edad?
Cuida tu salud general: controlar la presión arterial, el azúcar y el colesterol.
Mantén hábitos saludables: ejercicio, buena alimentación y descanso.
Evita el tabaco y el exceso de alcohol.
Consulta con un especialista: los tratamientos actuales (como los medicamentos intracavernosos, tratamientos orales o terapia psicosexuales) permiten disfrutar plenamente la sexualidad en cualquier etapa de la vida.
Comunica y comparte: hablar abiertamente con tu pareja y tu médico es clave para mantener la confianza y el deseo.
💬 En resumen:
El envejecimiento no significa el fin de la vida sexual, sino el inicio de una nueva etapa donde el placer, la conexión y la intimidad pueden vivirse con más conciencia y libertad.
La salud sexual también es parte del bienestar integral, sin importar la edad.